Volar

En algunas ocasiones hay que dejar que la mente y la imaginación se liberen igual que el vuelo de una mariposa...

martes, 23 de septiembre de 2014

Silencio.

           Mi cabeza daba vueltas, me encontraba como una mierda, ahí tirada sobre la cama, aun vestida como la noche anterior e intentando no expulsar el contenido de mi estomago, que básicamente era alcohol y mas alcohol... ¿Como he podido llegar a tal extremo?, lo se, yo lo único en lo que pensaba era en apartar a ese... de mi cabeza pero lo único que he logrado es encontrarme todavía peor de lo que estaba no se porque dicen que el alcohol te hace sentirte mejor, ahora mismo lo que haría seria volver atrás en el tiempo y decir: no, yo me quedo en casa con mi manta... pero no, tuve que hacerme la dura como si no me importara una mierda como me sentía, sonriendo cuando todo el mundo lo único que estaba esperando era que me derrumbara y empezara a llorar, pero me mantuve toda la noche con la misma expresión y bebiendo cada vez mas. Cuando llegue a casa, me tumbe en la cama, me sentía extraña, como si todo estuviese sucediendo como una película en la que yo solo soy la espectadora, me sentía vacía por dentro, ya no sentía nada.   

Solo una historia mas.

          Era de noche cuando llegue a la ciudad, y estaba aterrada, esta ciudad es completamente nueva y diferente a todo lo que había conocido hasta ahora, desde la muerte de mis padres, cuando tenia siete años de edad, he vivido en distintos hogares de acogida en distintos pueblos perdidos de todo, no se estaba del todo mal, pero, como añoraba a mis padres... cuando mi madre antes de dormir me cantaba una canción para que me pudiera dormir, y me besaba la frente, cuando mi padre me llevaba al parque a jugar y siempre acabábamos los dos tirados por la hierba... si, los echo de menos todos los días, pero la vida es así de cruel e injusta... y ahora aquí estaba yo, sola, sin nadie mas que acompañándome en este duro viaje que es la vida...  
            

lunes, 16 de diciembre de 2013

Nada es para siempre.

Es curioso como con unas cuantas palabras pueden hacer que grandes cosas se vayan a la mierda en un instante, como podemos perder a personas a las que queremos muchísimo, que tienen un hueco en nuestro corazón enorme y que cuando se van lo dejan con un vacío aterrador y lo único que queremos es que vuelvan a nuestra vida y que la llenen de alegría y color, que te hagan sonreír como aquellos días pasados, en los que disfrutaste de su compañía pensando que nunca se acabaría. Aquellos días llenos de payasadas, travesuras, risas, secretos y confesiones, de quererlas sin mas, sin otra razón mas que por ser esas personas que estaban ahí.